Había un juego que hacíamos con mis amigos del trabajo. Les preguntábamos con qué persona se irían a una isla desierta y metíamos las respuestas en una bolsa. Después se leían los nombres en voz alta y resultaba que un par de personas (anónimas) se irían a una isla desierta con uno. Fin del juego. Todo el mundo volvía a sus computadores con la ilusión de que algún día se hiciera el…
Maternidad
10 abril, 2020